Pablo Rodrigo Mancieri, de 29 años, fue detenido por estar acusado de participar en un asalto con modalidad de entradera en Quilmes. Al momento de su detención se le secuestró un arma y una importante cantidad de proyectiles. Pero el dato que no pasò desapercibido fue que Mancieri chapeó a los efectivos policiales y dijo ser chofer de la diputada nacional de Juntos para el Cambio, María Sotolano, Desde el entorno de la legisladora reconocieron que el detenido era militante de Juntos, pero que era empleado en el Consejo Escolar quilmeño y que no tenía relación con Sotolano.
“Nunca fue chofer. Solo que en algunas circunstancias hizo algunas changas”, afirmaron a este medio desde el entorno de Sotolano. Y dejaron trascender las sospechas del robo que sufriera Sotolano en su vivienda semanas atrás podría estar vinculado a esta misma banda delictiva.
Más allá de las afirmaciones, a principio de año se presentó en la Cámara de Diputados una adscripción para que el sospechoso preste servicios en el Congreso. Y en la actualidad, pese a estar destinado en el Consejo Escolar, la edil de Juntos Patricia Capparelli lo mantenía a Mancieri prestando servicios en su despacho del Concejo Deliberante.
Mancieri, tendría en su poder una importante cantidad de objetos que serían de origen ilícito, en una vivienda situada en Las Heras al 200, de Quilmes, en el procedimiento realizado el último sábado.
El allanamiento se originó en una causa en la que se investiga el robo con la modalidad entradera ocurrido el 8 de agosto pasado en dos viviendas situadas en la intersección de las calles Gran Canarias y República del Líbano.
En esa oportunidad se pudo ver a Mancieri y a otros tres individuos por medio de imágenes tomadas por cámaras de seguridad, salir de las dos viviendas con varios objetos robados tras concretar una entradera y escapar en un Ford Ka, en el que llegaron a la vivienda de la calle Las Heras, en donde descargaron los objetos robados. Durante el allanamiento en la calle Las Heras se logró secuestrar un revólver de calibre 38 del tipo lechucero y más de una veintena de proyectiles.
El detenido fue puesto a disposición de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) de Quilmes, a cargo del fiscal Martín Conde.