En un mes se va a cumplir un año de la denuncia realizada por el padre de la menor que habrìa sido abusada por su madre y la pareja, ambos efectivos policiales. Hecho que sigue sin avanzar en Asuntos Internos de la Policía Bonaerense y en la Justicia Penal. En tanto, la Justicia de Familia sostiene la tenencia de la menor en su madre. En las próximas horas, el denunciante avanzará con nuevas presentaciones judiciales.
El pasado 7 de abril, el padre de una menor de tres años denunció a su ex mujer y al novio de ella por abuso sexual, maltratos y amenazas que se habría generado sobre la hija que comparte con la apuntada. La causa bajo pp-13-02-006537, es investigada (¿?) por la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio Especializada en Violencia de Familia y/o Género N° 10 de Florencio Varela, a cargo de Mariela López.
El padre de la menor de tres años S.D.V, el efectivo policial Pablo Díaz no dudó un segundo en efectivizar la denuncia tras conocer lo que su hija le narró. Hecho por el que la Justicia y Asuntos Internos de la Policía Bonaerense debería haber avanzado en la investigación para llegar a la verdad. Los apuntados: la madre de S.D.V, la policía N.V. y su actual novio A.S, también integrante de la fuerza.
El abuso, maltrato y amenazas, denunciadas se habrían sucedido en la casa de la madre de la menor de tres años ubicada en Ingeniero Allan. “Siendo que con su pareja actual ya denunciado Oficial de Policía A.S. abusa de la menor mediante manoseos, lo cual mi hija relata que la toca ahí señalando su vagina, y que al repetir la situación le explico a mi hija que debe decirle a la mamá, manifiesta que le dijo a la mamá y ella la reta y pega como también rompió su chupete por decir lo que está pasando”, se destaca en el relato de la denuncia.
En el expediente que lleva adelante la Justicia y Asuntos Internos de la Policía Bonaerense se afirma que se encontraron lesiones en la menor, y que no es la primera vez que el abuso sucedería.
Y como evidencia hay un informe psicológico que dio positivo al abuso sexual y maltrato.
A casi un año de la denuncia y la presentación de las pruebas, la menor sigue bajo la tutela de la madre, por lo que el denunciante sospecha de una mano negra que estaría frenando la investigación, la que tendría un parentesco con uno de los denunciados.