En tiempos en que metalúrgicos se organizan en un Plan de Lucha con paro nacional, el secretario General de la UOM Quilmes-Berazategui-Florencio Varela, Adrián Pérez, fue sumamente crítico de la situación que viven los trabajadores, y no dudó en hablar de “odio de clase” y describió un problema comunicacional que termina en ignorancia y envenenamiento.
“Es el momento más sombrío desde la vuelta de la democracia, no solo por los miles de trabajadores y desocupados que la pasan mal por este corte abrupto en la entrega de alimentos a miles de comedores diseminados por toda la República Argentina, y principalmente en el conurbano donde vive el 50% de del país, sino además por la violencia ejercida por la Ministra de seguridad (Patricia Bullrich) ante la protesta del pueblo”, afirmó Pérez.
Al referirse a la situación social, el dirigente metalúrgico señaló que “el pueblo está sufriendo muchísimo. Acá los promedios de los trabajadores industriales rondan los cuatrocientos mil pesos de bolsillo. Hoy no hay una comida en la que vos no gastes menos de 10.000 pesos, y si comés los 30 días, suman en el mes unos 300.000 pesos y sin viajar. ¿Qué te quedó? Y estamos hablando que comiste una sola vez al día. Eso está pasando en las familias trabajadoras”.
Para Pérez, el factor de esta degradación es que “acá hay un problema comunicacional y es el envenenamiento a través de las redes sociales”.
“Todo esto ha hecho que se transforme nuestro pueblo en uno ignorante de la realidad y comprador de mentiras, yendo detrás de sueños imposibles de alcanzar, porque lo de Milei no es utópico, lo de Milei es acabar con la institucionalidad en Argentina, es acabar con los sueldos de los trabajadores”, sentenció el Secretario General en declaraciones radiales con el colega Víctor Alvero.
“A muchos les da vergüenza, otros están comenzando a verla y otros todavía, porque no hay que mentirnos entre nosotros, todavía bancan su propuesta. Fui a una fábrica a hacer una asamblea y un trabajador me dijo: ‘y ahora estamos viviendo esto porque nos mintieron tantos años y no podíamos tener subsidio a la luz, al gas, al transporte’. Le pregunto yo, cuántos transportes tomaba y me dijo que tomaba dos colectivos y a veces el tren, le dije que el subsidio es devolverle parte de todo lo que los argentinos ponemos con sacrificio con nuestros impuestos”.
Y agregó: “Por más que les duela, no hubo gobierno con los niveles más alto en la historia de la democracia, salarialmente hablando, que el de Cristina Fernández de Kirchner e invito a cualquiera que con números refuten esto que estoy diciendo”.
Al finalizar, Pérez apuntó contra los grandes empresarios y recordó a Pablo Moyano cuando dijo que este gobierno es de las corporaciones. “Hay una realidad, el empresariado argentino no ha podido superar el odio de clase. Me gustaría preguntarles si cuando ven a sus hijos jugar, seguramente muy felices porque económicamente no les falta nada, no piensan cinco minutos el daño que le están haciendo a sus propios trabajadores, llevándolos a ser pobres ‘con trabajo’, hacerlos parias sociales. ¿Tanto odio les tienen a sus propios trabajadores que lo han ayudado a masar sus riquezas?