Junto al director general de Cultura y Educación bonaerense, Alberto Sileoni, la intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza, recorrió el avance de obra del nuevo edificio para la Escuela Especial de Sordos e Hipoacúsicos Nº 505, que se está construyendo en los extalleres del Chaparral.
“Nosotros queremos la continuidad de nuestra gestión para poder seguir trabajando. Obras como esta son las bases de la transformación. Cuando hablamos de qué se elige, también se elige la posibilidad de tener esta escuela terminada, finalizada, no sólo la obra, sino luego todo el mobiliario que tiene que contener”, expresó Mayra.
Sobre las obras, la Jefa Comunal afirmó: “Estas son las cosas que se ponen en juego el 13 de agosto. Hay que tener conciencia ciudadana y hacer el ejercicio democrático de saber que algunos gobiernos trabajan para garantizar derechos como es éste, y el derecho a la educación y la construcción de escuelas, las especiales particularmente. Y hay otros gobiernos a los que no les importa, que dejan abandonadas las escuelas y que piensan en cerrar las universidades y demás. Así que creo que también se necesita sinceridad y claridad en las propuestas y en los planteos de qué representan unos y qué representamos otros”.
Por su parte, Sileoni señaló: “Estuvimos con Mayra Mendoza, funcionarios provinciales y municipales y la comunidad de personas sordas del distrito, recorriendo la obra de la Escuela de Educación Especial Nº 505, también junto a su directora Denise y parte del equipo docente. Esta es una de las tantas obras esperadas por la comunidad educativa, que gracias a la decisión de nuestro gobernador Axel Kicillof, tendrá los tres niveles: inicial, primaria y secundaria. Un trabajo incesante de articulación del Municipio y la Provincia, a favor de los derechos de los y las quilmeñas. Ya inauguramos 171 edificios nuevos y al igual que esta escuela, hay más de 100 que se están construyendo”.
La iniciativa forma parte del Programa Provincial Escuelas a la Obra y representa una solución a un reclamo histórico de los miembros de esta institución, que hace años no contaba con un edificio propio ni con las condiciones de infraestructura adecuadas. Desde 2012 debían funcionar en dos sedes distintas, separadas por dos cuadras: en un edificio alquilado en la esquina de Vicente López y Carlos Pellegrini, con un anexo en Vicente López entre Tucumán e Islas Malvinas.
El nuevo establecimiento incluye la construcción de 5 aulas de nivel inicial, 12 de nivel primario, 4 para talleres, 3 para nivel secundario y una de musicoterapia, sanitarios y biblioteca. Además, habrá un gabinete de fonoaudiología; espacios comunes como Dirección, Secretaría, sala multimedios, una sala para equipo técnico, una Preceptoría, un salón de usos múltiples, una sala de informática, laboratorio, un espacio para una huerta y área de servicios.
La escuela tiene una matrícula de 219 estudiantes repartidos en los distintos niveles y cuenta con el servicio agregado de TEL (trastornos específicos del lenguaje).
En este marco, Carlos Reynoso, presidente de la Asociación de Sordomudos de Quilmes y exalumno del instituto resaltó: “Ya se empezó con la construcción de la escuela, antes se sufría mucho porque el lugar era muy chico. Ahora vemos compromiso de trabajo, porque las personas sordas también tienen derechos”.