La institución situada en el corazón del Barrio La Colonia de Quilmes Oeste festeja un nuevo aniversario de su fundación.
El Club Social y Deportivo Tucumán cumple 89 años de vida este 5 de junio. Un grupo de vecinos y amigos del barrio, con don Gabriel Malozano como primer presidente de la institución, fundaron un día miércoles 5 de junio de 1935 la entidad que fue, es y será lugar de encuentro y disfrute en el que generaciones quilmeñas y de ciudades aledañas disfrutan de realizar diferentes actividades deportivas.
A lo largo de estos 89 años el Club Tucumán se caracterizó por albergar a numerosas familias que forjaron un sentido de pertenencia único, que se transmite de generación en generación de padres y madres hacia sus hijos e hijas.
El Club Tucumán siempre estuvo ligado al deporte en sus 89 años de vida. Actualmente en sus instalaciones se pueden practicar diferentes actividades recreativas y competitivas, entre las que se destacan la escuelita de fútbol masculino y femenino, patín artístico, la práctica de artes marciales (taekwondo y tang soo do), la pelota-paleta, fútbol 5. Además, el club cuenta con pileta de natación, gimnasio y una colonia de vacaciones para los más pequeños en la temporada de verano.
En la institución también practican el equipo de los chicos con capacidades diferentes del Quilmes Atlético Club. En este sentido, cabe destacar que varios jóvenes del plantel fueron convocados este último mes para integrar la Selección Argentina de Futsal Down.
Asimismo, los torneos de papi fútbol que se realizan en el club son los de mayor convocatoria de la zona sur, lo que generó que se haya denominado como “La Catedral del Fútbol” a la cancha de fútbol 5 de la entidad.
En los últimos catorce años, en el Club Tucumán se realizaron numerosas refacciones y puesta en valor de los diferentes espacios para seguir mejorando la infraestructura y distintos aspectos edilicios.
Familias de vecinos, vecinas, socios, socias y público en general que diariamente transita por la institución encuentran en el club un espacio que sienten como su propia casa, y siguen así forjando un sentido de amor y pertenencia hacia la emblemática institución.
¡Larga vida al Club Social y Deportivo Tucumán!
