Un hecho sorprendente se produjo el sábado pasado en Quilmes Oeste cuando los vecinos alertaron a la Policía sobre la posible muerte de una anciana –de nombre Isabel- que habitaba una casa ubicada en Calchaquí y Andrade de Quilmes Oeste.
Para sorpresa de los efectivos que arribaron al lugar, en una mesa hallaron una nota que decía: “Nosotros solamente robamos. La mujer estaba muerta y había mucho olor a gas”.
Los oficiales encontraron en cadáver de Isabel –de 94 años de edad- tendido boca abajo en el sector de la cocina. Los peritos de la Policía Científica corroboraron que el cuerpo presentaba quemaduras en el torso y estaba cubierto de manchas de sangre.
Según se informó, en el lugar se encontraron con un gran desorden y una reja del frente forzada por la que ingresaron los ladrones.
El hallazgo del cuerpo sin vida de la anciana había despertado todo tipo de conjeturas en el barrio cuyos vecinos le tenían un gran cariño. El robo había dado lugar a presumir que la mujer había fallecido a consecuencia de golpes o ahorcamiento por parte de los ladrones.
La información proporcionada por la Policía dejó un poco más de tranquilidad, pero igualmente el fiscal Martín Conte –UFI N° 3 de Quilmes- ordenó una autopsia donde se determinó que el deceso ocurrió por paro cardíaco, y que la data de muerte es de varios días.
En consecuencia, ahora los investigadores intentan corroborar la principal hipótesis, que es que una banda delictiva ingresó a robar a la vivienda, momento en que se encontraron con el cuerpo ya sin vida de la víctima. «La muerte se produjo porque se cayó accidentalmente en la cocina, y los delincuentes la encontraron así cuando entraron a robar» – indican desde la investigación.
FUENTE Quilmes Ahora