Te cuento algunos datos sobre la bebida social más consumida del mundo y la más popular entre los argentinos:

1 – La cerveza cumple un rol social único: invita a frenar, compartir y conectar: en tu casa, con una rica comida o en un bar, cada brindis es una excusa para reunirse, celebrar o simplemente estar juntos.

2 - La cerveza también es agroindustria. En Argentina, Cervecería y Maltería Quilmes impulsa un ecosistema federal con más de 1.200 productores agropecuarios, 250.000 comercios en todo el país, entre bares, restaurantes, almacenes, autoservicios, y 90.000 empleos a lo largo de toda su cadena de valor. Solo en 2024, la compañía exportó por 458 millones de dólares. 1 de cada 4 cervezas que vende en el mundo se hace con cebada de la Provincia de Buenos Aires.

3- Cuánto más fresca, mejor: La cerveza alcanza su mejor sabor y frescura apenas sale de la cervecería. Cervecería y Maltería Quilmes elabora sus cervezas localmente, con ingredientes 100% naturales y argentinos, y realiza más de 1.000 controles de calidad durante todo el proceso hasta llegar a la mesa de los consumidores.

4 – Todos podemos ser parte del brindis. Hay una cerveza para cada gusto, estilo de vida o necesidad. La compañía tiene 3 cervezas sin alcohol en el mercado argentino, Quilmes 0.0, Stella Artois Sin Alcohol y Corona Cero. Y fue pionera en lanzar la primera cerveza sin gluten del país (Michelob Ultra sin Gluten), para que cada vez más personas puedan levantar su vaso y brindar.

5 – El ingrediente secreto, el viento. Cervecería y Maltería Quilmes, a través de un acuerdo de compra con Central Puerto, genera el 100% de la energía eléctrica de fuentes renovables que necesita para la elaboración de todos sus productos.

6 – Una bebida que fomenta el consumo moderado. Por su bajo contenido de alcohol y su variedad de estilos la cerveza es la opción ideal para disfrutar con responsabilidad. No solo la categoría ya incorpora opciones 0.0 con excelente aceptación, creciendo un 50% año a año, sino que impulsa que todas las experiencias sean positivas, con foco en el triple CERO: 0 en menores, 0 al volante y 0 excesos.

7 - La espuma de la cerveza no es negociable. Aproximadamente dos dedos de espuma debemos garantizar en el servido siempre. La espuma muchas veces habla de la calidad de la cerveza, de la limpieza del vaso y del correcto servido. No solo mejora la apariencia de un vaso, sino que concentra aromas, protege a la cerveza de la entrada de oxígeno y de la salida del CO2 (gas de la cerveza).

8 - El vaso importa (y mucho). Si tomás la cerveza directo de la lata o la botella, no solo perdés parte de la experiencia, sino que también puede resultar menos cómoda. Al no servirla en vaso, no podés percibir sus aromas, ni ver su color, brillo o espuma. Servirla correctamente mejora el disfrute en todos los sentidos.