Cosas raras suceden puertas adentro del cuartel de Bomberos Voluntarios de San Francisco Solano.
El bombero voluntario Jesús Azcona denunció en su descargo al Tribunal Disciplinario que es víctima de una persecución luego que denunciara por amenaza de muerte al Tesorero de la institución. Situación que se agrava cuando es transferido a cumplir servicio en un destacamento, y que tiene su punto culmine ante la avanzada de la Comisión Directiva de juzgar una sanción disciplinaria ya fue juzgada, e intentar juzgarlo por sus estados de WhatsApp.
En su descargo, Azcona no duda en relacionar los hechos y señalar que no es tratado como la víctima, cuando su victimario transita los pasillos de la Asociación de Bomberos Voluntarios de San Francisco Solano, haciendo una perimetral al revés, alejando a la víctima: “voy a manifestar que esto es una persecución a mi persona por las diferencias que han generado amenazas a mi integridad física por personas que integran la comisión directiva del cuartel, las cuales fueron denunciadas, y a partir de ese momento comencé a sufrir una persecución y sanciones injustificadas”.
Y advierte al Tribunal Disciplinario que “Los hechos imputados ya fueron sancionados, y por vía de este sumario se los trae nuevamente para juzgar dos veces las mismas conductas”. Agregando que “De las personas que van a entender en el sumario administrativo en mi contra y que deben tomar resolución en el mismo, informo que el Sr. Vega Raul es pariente del Sr. Javier Lora tesorero de la institución y quien me AMENAZO DE MUERTE delante de quienes estaban en el cuartel el 16 de Mayo de 2022, esto consta en la causa IPP 13-00-012485-22/00,por esto recuso que se me juzgue con este tribunal por considerarlo parcial y con intereses”.
Al hablar de su calidad de víctima y la falta de contención que le otorgó el cuerpo bomberil a Azcona y su familia, el Bombero fundamenta que “Por esto fui apartado del cuartel central y enviado a cumplir servicio a un destacamento, violando mi derecho como víctima de ser preservado y priorizando la defensa del directivo que me agredió el cual ostenta una función jerárquica superior en el cuartel”.
Finalmente, Azcona solicita que “se deje sin efecto el presente sumario administrativo por tratar temas que ya fueron juzgados, como se explicó en el descargo, lo cual lo hace improcedente”.
Pero esta no sería la única situación que sucede puertas adentro del cuartel central de 893. Otras iniciativas de dudosa procedencia comienzan a salir a la luz.