La Canasta Básica Alimentaria registró en octubre, en las localidades del interior, una suba promedio de 0,8% mensual, bastante por debajo del alza que mostró en la Ciudad de Buenos Aires donde, de acuerdo con el Índice de Precios al Consumidor que monitorea el Gobierno porteño, los precios crecieron 2,1%. Con todo ello, las ventas minoristas de alimentos muestran una caída interanual de 1%.
Si bien Alimentos y bebidas es considerado un rubro “inelástico” porque se trata de bienes de primera necesidad, imprescindibles para la supervivencia humana y que, difícilmente su consumo se ajuste por precios, sus ventas mostraron una caída de 1% en relación a octubre del año pasado, de acuerdo con el relevamiento que realiza la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) en todo el país.

Sucede que la persistente suba de los precios ha masificado la fragilidad del bolsillo de los argentinos. “Durante octubre, las ventas del rubro estuvieron afectadas por la falta de liquidez y el bajo poder adquisitivo de los consumidores, en un contexto donde los bienes del hogar no fueron prioridad de gasto. La incertidumbre electoral y las elevadas tasas de financiación limitaron las compras con tarjeta, mientras que las promociones y descuentos en efectivo no lograron generar una mejora sostenida”, indicaron los dirigentes de CAME al explicar los resultados del observatorio.
En efecto, el rubro Alimentos y bebidas del Índice de Precios al Consumidor de la Ciudad de Buenos Aires evidenció un incremento de 2,1% mensual, contribuyendo en 0,36 puntos porcentuales al nivel general de la inflación en la Capital.
Según el Gobierno porteño, al interior de la división, los principales impulsos provinieron de Pan y cereales (2,7%), Frutas (8,6%) y Carnes y derivados (1,7%). Con ese desempeño, la suba acumulada del rubro en lo que va del año llegó a 23,1% y la interanual a 28,1%.
Esos porcentajes están en línea con las “Expectativas de Mercado” de las consultoras que participan del monitoreo que realiza mes a mes el Banco Central de la República Argentina y que proyectó para octubre una inflación general en torno al 2%.
Sin embargo, bastante por debajo de estos promedios se ubicó el alza que se observó en las localidades del interior del país.
De acuerdo con la Fundación Colsecor, la Canasta de alimentos y bebidas que determina la indigencia o no de un hogar mostró en octubre un incremento promedio de 0,8% respecto de septiembre, en las 29 localidades de siete provincias argentinas. Con esta suba, el costo promedio de ese grupo de alimentos y bebidas evidenció un incremento del 19,1% acumulado en el año, en tanto que la diferencia con octubre del año pasado fue de 21,4%.
Canastas familiares
El relevamiento de la Fundación Colsecor refleja además el valor nominal de la Canasta Alimentaria según la composición del hogar, en las localidades del interior.
De esta manera, un adulto mayor que vive solo requirió 159.852 pesos para no ser indigente, en tanto que una familia compuesta por dos adultos mayores necesitó en octubre de al menos 239.778 pesos, mes en el que la jubilación mínima nacional fue de 326.266 pesos.
Por su parte, un hogar de tres integrantes precisó 393.236 pesos, uno integrado por dos adultos y dos menores en edad escolar necesitó 493.942 pesos, y uno de cinco en el que habitan tres menores requirió 519.519 pesos.
Fundación Colsecor
La Fundación Colsecor nació en 2018 con el fin de promover a la Economía Social como factor de desarrollo para las localidades donde las cooperativas de prestación de servicios audiovisuales y digitales se encuentran insertas. Sus principales ejes de trabajo están relacionados a la investigación y producción de conocimiento de pueblos y ciudades Argentinas, capacitación y desarrollo local. Su presidente honorario es José "Pepe" Mujica.
Colsecor es una integración de cooperativas y pymes, que desde 1995 reúne a entidades que prestan servicios de televisión por cable y telecomunicaciones en 300 comunidades de Argentina.