
De la Quiebra a la Alta Complejidad
Poli recordó el inicio del proyecto en diciembre de 2019 con la adquisición de la Clínica del Niño y la Familia de Solano, que se encontraba quebrada.
"A los pocos meses vino la pandemia... Sin embargo, nos pusimos las máscaras de plástico, los barbijos y los trajes y le salvamos la vida a más de 3.500 personas," enfatizó el dirigente, destacando el rol crucial del personal.
En los últimos seis años, la obra social experimentó un crecimiento exponencial, sumando a su patrimonio:
• Clínica Brandzen (Quilmes Centro)
• Clínica Ezpeleta
• Un centro de alta complejidad en Chivilcoy
• La histórica Clínica Espora de Adrogué
Innovación: Equipamiento y Atención a Pacientes Obesos
El dirigente hizo especial hincapié en la modernización de los centros, que hoy cuentan con equipamiento de avanzada, incluyendo tomógrafos, ecógrafos y mamógrafos.
Un logro significativo es la capacidad de la Clínica Ezpeleta para atender a pacientes con obesidad. "Tuvimos que ampliar los quirófanos... y hoy somos la primer clínica en poder atender obesos," señaló Poli, refiriéndose a la posibilidad de realizar tomografías a personas que antes no tenían acceso a este servicio.
Impacto, expansión y "sorpresa"
El plan de expansión no solo mejoró la infraestructura de salud, sino que también tuvo un impacto positivo en el empleo. Poli reivindicó que la compra de estos centros salvó y amplió los puestos de trabajo, elevando la plantilla total a 650 empleados entre profesionales, administrativos y maestranza.
Actualmente, la obra social de Remiseros atiende más de 12 mil consultas al mes a través de convenios con diversas obras sociales.
Asimismo, Poli no descartó “sorpresas” para el 2026/2027, misterio que podría dejar abierta una posible candidatura.